7 Picos - 18 septiembre 2013

Le tocaba proponer las excursiones a JP, y después de la votación, salió elegida la "RT328-7 Picos" de AC, pero modificada para volver por el Camino Schmid. Cómo JP tenía que estar pronto en Madrid, quedamos en el Puerto de Navacerrada a las 11h. Esta vez, la segunda salida del comienzo de curso, sólo íbamos a vernos Juan Angel, Pablo, Jero, Chicho y JP. Este curso comienza muy diezmado, vejez o ganas de alargar las vacaciones de estos jubilados son las causas principales de este abandono. Esta vez, tampoco pudo venir el leader semanal, JP, así que nos pusimos en marcha un poco más tarde de la hora convenida con un rumbo que podría ser modificado, si quisiéramos.

La excursión ya la habíamos hecho por primera vez en el 2007, y la repetimos en el 2011, por lo que al llegar al Alto del Telegrafo  nos apareció la posibilidad de optar por la Senda Herreros. Jero decía que era muy bonita, pero que el sendero no siempre era fácil de seguir. Tenía la senda en el GPS, pero experiencias pasadas me decían que no siempre es de fiar lo que aparece en el mapa, ya nos había pasado en alguna ocasión, algunos senderos no estaban o incluso estaban desplazados de su trazado actual, así que nos decidimos a seguir la cuerda de 7 Picos.

Lo que llama la atención en esta excursión, además de sus hermosas vistas hacia el sur y el norte, son los millones de hitos que jalonan el camino. Me preguntaba , mientras subía, si eso no sería otro ejemplo de nuestro carácter, para qué tantos hitos?, ayudar o simplemente decir: por el mío se va mejor. Resulta difícil imaginar que uno está haciendo algo singular, a pesar de estar caminando por varios dosmiles, pero uno es optimista y procura disimular estos pensamientos nefastos.

Llegando al último pico, al de Majalasna,  nos dirigimos directamente al Cerro Ventoso, una bajada larga y empinada, que con nieve debe tomarse con mucha precaución, pero que en esta ocasión, al estar todo tan seco, sólo había que procurar no deslizarse en una piedra suelta o en las nuevas piñas de los "albos" que ya empezaban a aparecer.

Era temprano, así que no comimos en el Cerro Ventoso, cómo en alguna ocasión, y lo hicimos más tarde, cerca de la Senda de los Cospes, en unas rocas graníticas tan características de este paisaje.

Vino en botella ( Paco se llevó la bota al Sur) y bocadillos variados. "Todo lo que era sólido" de Antonio Muñoz Molina cómo postre. Pequeña siesta (algunos) y merodeo por los alrededores del que escribe.

El Camino Schmid de vuelta, claro y sin pérdida, en el que se observaba que habían limpiado los muchos canales de piedra que dirigen el agua hacia los laterales y que por tanto impiden el deterioro del camino. El Schmid tiene la ventaja de que todo el mundo lo seguimos y no estropeamos más el monte con otros caminos jalonados de hitos.

Por último, al no poder estar en la excursión JP, escribo yo esta pequeña crónica para nuestra web.

Chicho

Nota : Pablo insertará fotos de la excursión.