El recorrido de esta marcha era alcanzar la llamada Cabeza Líjar (1.823ms) desde el puerto de El León (1.510ms), accediendo por el GR-10 que va por la cuerda de esta sierra. Después bajar al collado de La Mina (1.700ms.) dónde se cruza con la antigua carretera de Peguerinos y finalmente desde allí acceder al refugio de Salamanca (1.785ms.).
Durante los años del Franquismo lo llamarón Puerto de los Leones de Castilla, debido a que, en los primeros momentos unidad militar de Falange de Valladolid intentó cruzar la sierra para llegar a Madrid. No lo consiguieron aunque, pese a su inferioridad numérica, sí lograron tomar el puerto. A esta bandera se la denominó "Leones de Castilla", en alusión a los Leones y a su fiereza en la batalla. Las faldas de estas montañas, como las de sus vecinas, están sembradas de restos de construcciones bélicas procedentes de la Guerra Civil española en diferentes estado de conservación.
Nos juntamos en el puerto siete
esforzados marchosos (Jero, Chicho, JL, Miguel, JA, Paco y JP), que no es mala
marca para la época actual. El día era soleado y ventoso pero con buena
temperatura.
Se empieza a andar por la senda GR-10 que al principio coincide con la
antigua carretera a Peguerinos y vemos las primeras cruces (de un viacrucis
suponemos), a la media hora nos metemos en el bosque de pino silvestre y se
empieza a subir tomando la cuerda de esta sierra para acceder a Cbza. Lijar.
Ocurre que Paco y yo nos retrasamos algo leyendo algunos carteles que hay a lo
largo del recorrido y que cuentan cuestiones relativas a la historia del lugar y
la flora sobre todo. Pero en un punto determinado en el llamado Collado de La
Lasca (1600ms.) se encuentra con la pista (antigua carretera) y hay que
atravesar a su vez un portón para seguir por el GR-10 que no cogimos y sin darnos cuenta seguimos
por la pista. Se veía perfectamente el Valle de los Caídos a lo lejos, para
redondear todo el ambiente bélico que estas zonas recuerdan.
Empezamos a pensar Paco y yo que
habíamos perdido el Gr-10 porque no veíamos ya sus marcas. Así llegamos al Collado
de la Mina (hubo una mina de wolframio por allí) donde parece que se cruza ya a
la provincia de Ávila y a la derecha subía un sendero que iba a Cabeza Líjar
después de cruzarnos con otros senderistas que andaban pidiendo un mechero que
les permitiera hacerse un café, nos aseguramos que nuestros compis estaban en
la cumbre ya.
En Cabeza Líjar hay un magnífico búnker que ha sido reconvertido en refugio
y en mirador, una construcción circular que da un aspecto característico a la
cima. Desde este mirador se ve una de las mejores vistas de la Sierra de
Guadarrama y las dos mesetas y se cortan las tres provincias Segovia, Avila y
Madrid.
La sierra de Guadarrama tiene una
orientación este-oeste, en Cabeza Líjar sale el ramal norte sur que se conforma
con la cercana cumbre de Cueva Valiente y la sierra de Malagón. Hacia el
oeste, hacia Ávila se forma el Valle Enmedio, mientras que por el sur se abre
la llanura de la meseta donde se ven los embalses de La Jarosa y Valmayor y todos
los núcleos poblacionales de su parte oeste. Entre las últimas estribaciones de
la sierra, mirando al suroeste, se puede ver la gran cruz del Valle de los
Caídos que se levanta en un cerro situado en medio de la magnífica vista
del valle de Cuelgamuros.
Después de tomarnos en el refugio del bunker los panchitos regados con la
bota, nos fuimos a conquistar la Salamanca bajando de nuevo al collado y
subiendo los 100ms de desnivel hasta ese refugio pisando nieve, puesto que estaba
el camino por zona muy sombreada y a la umbría.
Como allí no se estaba muy a gusto, porque coincidió con la aparición de
las nubes y hacía viento fresco, empezamos a hacer el recorrido de vuelta
buscando un lugar idóneo para comer. Finalmente lo encontramos y tuvimos cielos
despejados con un estupendo sol, lo que permitió disfrutar de la comida como
siempre hacen Los Marchosos, regada con vino, café y dulces; solo faltó el aguardiente
que normalmente da el último toque.
Sobre las 16hs. empezamos a hacer la vuelta y nos dimos cuenta en este
paseo que todas las cruces incluso la de un altar que era más grande y que
parecía hecho para misas de campaña estaban rotas y tumbadas lo que parecía
algo realizado a propósito para contrarrestar en parte su significado. En una
agradable charla, con un cielo hermoso y
unas vistas de la Sierra de Guadarrama impresionantes alcanzamos el puerto de
nuevo y los coches.
Nota: El marchoso Paco y el cronista JP se separaron del grupo en la subida a Cbza. Lijar porque se entretuvieron leyendo los paneles informativos y porque el primero confiaba en el segundo digo yo.
Pero el marchoso JP empieza a estar algo oxidado porque sale menos y además no se miró nada de los mapas antes de la excursión cuando en realidad la había propuesto él. Estudiado ahora a posteriori con los mapas no entiende que les ocurriera eso, es obvio que no se sabía la lección y procurará que no ocurra más.
Mapas y fotos:
Nota: El marchoso Paco y el cronista JP se separaron del grupo en la subida a Cbza. Lijar porque se entretuvieron leyendo los paneles informativos y porque el primero confiaba en el segundo digo yo.
Pero el marchoso JP empieza a estar algo oxidado porque sale menos y además no se miró nada de los mapas antes de la excursión cuando en realidad la había propuesto él. Estudiado ahora a posteriori con los mapas no entiende que les ocurriera eso, es obvio que no se sabía la lección y procurará que no ocurra más.
1 comentario:
Poco que añadir a la completa y amena descripción de JP. Me acordé un poco de JGC ya que en la ruta había 4 o 5 geocaches, yo busqué el de Cabeza Lijar, pero al estar en un roquedo en el que había un puesto circular de vigilancia y con demasiadas rocas agresivas en el entorno, no quise arriesgarme a resbalar y desistí, además como ahora no aparece en el gps el tipo de geocach ( los bajo por problemas y cómo loc/wpt) no sabía el tamaño que debía buscar.
Hablando de la excursión, me gustó mucho, no es nada dura y las vistas que se alcanzaban, tanto desde Cabeza Lijar como desde la Salamanca, en este día claro y soleado eran muy agradables. No me pareció tan agradable descubrir tanta cruz (algunas destruidas) que delataban de que bando estaba la Iglesia en aquella contienda y que marcaban el camino de un Via Crucis que terminaba en el altar con gran cruz derruida que se ve en una de las fotos. Supongo que todas ellas construidas después de la contienda, por cierto hoy es 1 de Abril y supongo que ya no habrá que celebrar aquella victoria infame. Menos mal!
Chicho
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