Cuando me comentaron que yo era el que tenía que hacer las propuestas lo
primero que hice fue mirar la predicción del tiempo, y resultó que como este otoño
está siendo muy distinto a lo habitual también esta semana iba a tener nuevas borrascas
que están trayendo lluvia, nieve y frío. Decidí proponer en zonas no altas,
porque se predecían nevadas en ellas acumulando más nieve a lo que ya tenían y fueron las de San Agustín
de Guadalix, La Barranca y La Cabrera que además permitieran hacer jornada de
medio día y luego comer a resguardo de las inclemencias en un restaurante.


A este
contraste paisajístico entre los terrenos ganaderos del piedemonte serrano, con
gran superficie de pastos y arbolado, y los propios de la campiña, dedicados en
su mayor parte a cultivos con escaso arbolado, se añade el río Guadalix que entra
en el municipio como un río propio de montaña y lo abandona conformando una
amplia vega. Geológicamente tiene un variado mosaico en el que afloran
esquistos y gneises con materiales metamórficos y sedimentarios que dan suelos
pobres pero que con la actividad ganadera se han desarrollado con material
arbóreo y de gran riqueza ecológica.
La cobertura vegetal según el sustrato se compone de alisedas, encinares con enebros y coscojares. Entre el piedemonte serrano y la zona de campiña, se interpone una ceja caliza, tradicionalmente explotada como cantera de piedra y cal, sobre la que se desarrolla la vegetación propia de estos sustratos y que viene a romper una posible transición más continuada entre la vegetación del piedemonte y la de la campiña.
La cobertura vegetal según el sustrato se compone de alisedas, encinares con enebros y coscojares. Entre el piedemonte serrano y la zona de campiña, se interpone una ceja caliza, tradicionalmente explotada como cantera de piedra y cal, sobre la que se desarrolla la vegetación propia de estos sustratos y que viene a romper una posible transición más continuada entre la vegetación del piedemonte y la de la campiña.
El recorrido de la excursión lo hicimos en sentido contrario a las agujas
del reloj por lo que fuimos pasando por la zona de La Rinconada, cruzamos el
rio por el puente de San Antonio y llegamos a las Cascadas del Hervidero donde
admiramos la zona rocosa y las caídas del agua que era abundante por lo llovido
y nevado en los montes de Morcuera los últimos días. Estuvimos allí tomando los
panchitos y al reanudar la marcha cruzamos el río de nuevo por uno de los
canales que cruzan elevados sobre el río. Desde ese punto había que superar un
desnivel de 100ms a través de un sendero para adentrarse en la dehesa y llegar
a la Almenara de los Castillejos que es una atalaya donde están situadas unas antenas
y seguramente se utilizó para algún desvío del canal.
El bosque de la dehesa está compuesto de encinas, carrascas, enebros,
coscojares y también bonitos por su coloración en otoño cornicabras. Además ya estaba
el suelo verde por las lluvias otoñales y fue un disfrute patear por allí. Salimos
de la dehesa, cuando ya llevábamos más de 7kms andados, por la puerta metálica
que da acceso.
Cuando llegamos al Torreón de la Retuerta, que debe ser un respiradero de los canales, aparecía un acueducto de más de 100ms de largo que permite salvar una depresión del terreno a uno de los canales y algunos creímos que teníamos que cruzarlo pero no era necesario y había que bajar el desnivel que salvaba pero tomando dirección a la izquierda que nos hizo tomar un camino forestal que nos llevó a los coches.
Cuando llegamos al Torreón de la Retuerta, que debe ser un respiradero de los canales, aparecía un acueducto de más de 100ms de largo que permite salvar una depresión del terreno a uno de los canales y algunos creímos que teníamos que cruzarlo pero no era necesario y había que bajar el desnivel que salvaba pero tomando dirección a la izquierda que nos hizo tomar un camino forestal que nos llevó a los coches.
Empezó a llover justo cuando entrábamos en el restaurante, que ya nos tenía
preparada la mesa. Creo que comimos bien y a buen precio por lo tanto
satisfactorio salvo la tardanza del postre que cabreó algo a Paco. Volvimos a
Madrid cuando llovía copiosamente.
JP
2 comentarios:
Me hubiera encantado estar con vosotros,pero creo que leyendo la crónica tan detallada de JP, uno se puede imaginar la flora yla geología del paseo, aunque le ha faltado algo de fauna, ni vacas, ni caballos, ni ovejas, ni un humilde conejo han llamado la atención del cronista. Leyendo la crónica me repetía lo culto que es JP, pero me hubiera gustado que me hubiera desvelado el postre tardon de Paco. No se puede ser perfecto.
Chicho
No se puede añadir mucho más a la descripción orográfica y de flora tan detallada.
Lo que si observamos antes de entrar a la dehesa fue rastro de bastantes cartuchos, lo que nos hizo sospechar que estábamos en un coto de caza, esperando que no hubiera cazadores en aquel momento. Al entrar a la dehesa, vimos un cartel con las fechas en que hay casa y no se puede pasear por el coto. Hay que tenerlo en cuenta para otras marchas que puedan hacerse por ese sitio.
La marcha fue como un collage de otras marchas que ya habíamos hecho por la zona y resulto muy agradable.
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