Se trata de un recorrido por los Montes de Valsaín, desde el Puente de la
Cantina de donde arranca el Río Eresma al juntarse varios de los arroyos que lo
alimentan. Ascenderemos al puerto de Navacerrada y después a los Cogorros, que
poseen unos espectaculares miradores de toda la sierra, en su extremo sur el
Mirador la Gallarza, con vistas preferenciales a la vertiente Este del Valle y
Pinares de Valsaín, y en el extremo Norte el Mirador de Maravillas que abarca
ambas vertientes con roqueros. Es un ascenso que una vez alcanzado y desde el
Puerto de Navacerrada formado una circular que abraza los 7 primeros kilómetros
de la CL-601 que nos lleva a Segovia, como hemos mencionado arrancando y
finalizando en el Puente de la Cantina.
La salida desde el parking del Puente de la Cantina, situado en el km 17 de
la CL-601, que está al terminar las famosas siete revueltas. Dicho puente y sus
parking en los extremos se rehabilitaron en el 2015, quedando una magnifica
zona de arranque de infinidad de rutas de senderismo, por los Montes de
Valsaín.
Arrancamos pues JG,JL ,MA, JA, Paco y JP puesto que Miguel se lesionó
jugando al pádel el día anterior. Desde la conocida Fuente de la Canaleja, por
el sendero directamente descendiendo al Arroyo del Puerto del Paular, principal
arroyo que aporta sus aguas justo a partir del Puente de la Cantina a la
formación del río Eresma, una vez a la altura del arroyo las sendas se
ramifican pero nosotros seguiremos la más lejana al arroyo por ir algo más
altos y despejados. Pronto sin mayores problemas nos tocara pasar por encima
del Arroyo del Cancho, y continuando nos encontramos un pequeño puente de
madera sobre el arroyo del Puerto en el que nos hicimos fotos por empeño de
Paco que ahora es un fotógrafo empedernido.
Ya no volveremos a ver este arroyo, porque deja paso al arroyo de las
Pintadas, justo unos metros más adelante si nos desviamos unos metros a
derechas, podemos ver el Puente de las Pintadas un pequeño y antiguo puente en
piedra por el que pasa en sus últimos coletazos el arroyo del mismo nombre para
unirse al arroyo del Puerto.
Retomamos la senda, que más que una senda es una ancha calzada de asfalto,
se trata del Camino de la Sotela, entre altos pinares de Valsaín y algún que
otro cantar de pájaros, pronto a la altura del pequeño arroyo de la Peñarrodada
que suelta sus aguas a de las Pintadas, dejamos este camino para de forma
abrupta comenzar un fuerte ascenso continuando por la senda del Arroyo de las
Pintadas dirección inequívoca hacia el Puerto de Navacerrada.
Entre tanto pino hermoso no nos cruzamos con ningún senderista cosa rara, y
cuando llevábamos una hora y media y estábamos a más 1700ms de altitud
(habíamos subido 4kms y 350ms de desnivel) paramos a descansar y tomarnos los
panchitos y largos besos a la bota de Paco.
Cuando reanudamos la marcha en un visto y no visto estamos finalizando esta
senda asomando por uno de los postes de subestación eléctrica que une el Puerto
de Navacerrada con el de Cotos. Han sido 2.30 h pero con una parada de 15
minutos y varias de 5 minutos, por lo que en 2 h no habría problemas en
concluir esta senda.
Aquí en el Puerto de Navacerrada, no
nos entretenemos apenas, pues ya comienza a coger volumen de gente que se
acerca a la zona, por lo que sin perder tiempo cogemos la pista asfaltada que
nos sube a la Residencia Militar de los Cogorros, justo por la derecha del Bar
Dos Castillas, en apenas 10 minutos nos situamos y atravesamos la residencia
para alcanzar el objetivo principal del día, la Loma de los Cogorros, en primer
término y precisamente en el punto más alto de dicha loma, nos encontramos con
una estación radiométrica operativa desde el 2013.
Continuamos por la loma y a una
altura más o menos equivalente 1.894 m a la derecha en un saliente, se trata
del Mirador de la Gallarza, construcción de una plataforma en saliente hacia el
vacío sobre las mismas rocas en 1.952 en homenaje a un Capitán del ejército del
aire, este mirador está hacia la vertiente Este del Valle del río Eresma,
dejándonos disfrutar en abanico desde el Alto del Telégrafo, hasta el macizo de
Peñalara, tapándonos la vista de Cuerda Larga, el cordal que más abarca la Loma
del Noruego.
Volvemos a la senda de la Loma de los Cogorros, para entre pinares
retorcidos por las ventiscas invernales llegar al extremo Norte de la loma el
Mirador de Maravillas, fácil de identificar por que el sendero parte en dos las
moles rocosas. Alarga la visión hasta llegar hasta la Granja de San Ildefonso,
y el roquero izquierdo toda la vertiente Oeste de Valsaín, con Siete Picos
Norte al completo, Monton de Trigo destacando y la mujer muerta a su derecha
donde la Pinareja no permite ver el siguiente punto más alto del cordal Peña
del Oso.
En este mirador comimos, con la ensalada común (inmensa), la bota y los
bocatas y la charla pudimos recuperar las fuerzas.
Pues ya solo queda el descenso por la vertiente Oeste de la carretera de
las siete revueltas, un sendero de frente marcado por mojones y con tendencia a
izquierdas (Noroeste), nos bajará sin perdida alguna hasta la Pradera de la
Machorra, donde en esta época el verde se cambia por el tostado, esperando
nuevas lluvias para volver a coger su verdadero color, atravesamos la pradera y
buscamos el sendero dirección Oeste que nos bajará hasta el Arroyo del
Telégrafo.
Allí nos quedamos Paco y JP para disfrutar el sonido y el agua del arroyo
charlando y retozando media hora, los demás se fueron. Retomamos el arroyo y que
ya sin soltarlo a veces por sus orillas y otras algo más retirado, nos
conducirá hasta el Puente del Telégrafo, punto donde se junta con el Arroyo
Minguete, que dejará sus aguas en el río Eresma y dando por finalizada una ruta
en la que nosotros hemos empleado 5.
JP
Graficas
3 comentarios:
Una descripción muy completa y detallada y con muchas fotos.
El final tenia una alternativa que alargaba un poco el recorrido pero que seguía por el borde de dos arroyos pasando por el "baño de Venus", paraje muy arbolado y refrescante. Un grupo hicimos este recorrido.
Jesus GC
Hola
Una excursión que no conocía y por eso me resultó doblemente interesante. Lo peor fue la prolongada bajada al arroyo del telégrafo que me produjo agujetas en los días siguientes, pero lo doy por bien empleado.
Además en la narración Jesús describe con todo detalle los accidentes geográficos que encontrábamos.
Lo que más me gustó fue la vuelta por el margen del arroyo del Telégrafo, pasando por el Baños de Venus, hasta su desembocadura en el Eresma entre bosques de helechos.
Saludos
Miguel Ángel Lázaro
Me da pena no haber podido acompañaros a esta excursión. No conozco los senderos de subida al puerto de Navacerrada y por lo que se ve en la crónica aún estaban con helechos altos y verdes. La parte de bajada por la loma de los Cogorros y la pradera de la Machorra ya me resulta conocida. Con la descripción tan detallada de arroyos, puentes, miradores y praderas no es necesario llevar GPS, sólo llevar la crónica en el macuto. Muy hermosas las fotos del paisaje, vosotros un poquito más viejos.
Chicho
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