DE GARGANTA DE LOS MONTES A PUERTO DEL MEDIO CELEMÍN 17-02-2016
Al final solamente fuimos 5 los marchosos dispuestos a hacer la
marcha elegida: Garganta de los Montes al Puerto del Medio Celemín. Esta marcha tenía el aliciente de no haberse hecho nunca y podría servir de base para otras por la zona.
Juan Ángel acudió a casa de José Luis y en un solo coche, fuimos
al pueblo de Garganta de los Montes. Íbamos sin saber que nos encontraríamos
porque había nevado el día de antes y por la tarde se esperaban nevadas (de
hecho vimos máquinas echando sal en La A-1).
Sin embargo en Garganta, a 1100 metros y 2 bajo cero, hacía sol,
no hacía viento y comenzamos la marcha con muy buenos augurios que se cumplieron.
La marcha comienza siguiendo la calle de las tres cruces en una empinada cuesta
y sigue por un ancho camino bastante llano en su inicio llamado “Camino de la
Mina”, que en esa parte llana también se llama “Camino del Valle del Lozoya”. Vimos
un área recreativa y un helipuerto al comienzo. En una bifurcación (por donde
se vuelve) hay que irse a la derecha siguiendo el “Camino de la Mina” en vez de
seguir hacia El Cuadron. Este camino, hay que continuarlo según el track en un punto en que se convierte en senda y
pica bastante hacia arriba hasta que se une al PR48, (si se sigue por el camino
ancho se da una vuelta muy grande para ir al mismo sitio). El Pr 48 se sigue un
poco hasta que se alcanza una especie de collado llamado “Rasa de Matalapeña”.
Allí dejamos el PR48 y por una senda de ganado que no está en el mapa, llena de
barro, muy empinada pero afortunadamente con el barro helado, anduvimos hasta
que la senda se abrió algo y se hizo menos pendiente y a orillas de un abrevadero tomamos los
panchitos. Por cierto, el desagüe del abrevadero estaba obstruido por las algas
y lo desatascamos.
Seguimos bajando hasta que nos encontramos varias vallas que nos separaban de la Cañada Real Segoviana y de unos empleados de una empresa concesionaria que se dedica a quemar restos de la poda. Siguiendo exactamente el track , desanudamos hasta 3 cuerdas que cerraban sendas puertas y pasando incluso por un pasillo para ganado accedimos al GR-10. Ya por la Cañada ascendimos hasta el viejo puerto del Medio Celemín, en el que como especie de peaje había que pagar medio celemín por cada fanega de cereal que se transportase, o lo que es lo mismo: en torno al cinco por ciento de la mercancía con la que se pretendía comerciar.
Seguimos bajando hasta que nos encontramos varias vallas que nos separaban de la Cañada Real Segoviana y de unos empleados de una empresa concesionaria que se dedica a quemar restos de la poda. Siguiendo exactamente el track , desanudamos hasta 3 cuerdas que cerraban sendas puertas y pasando incluso por un pasillo para ganado accedimos al GR-10. Ya por la Cañada ascendimos hasta el viejo puerto del Medio Celemín, en el que como especie de peaje había que pagar medio celemín por cada fanega de cereal que se transportase, o lo que es lo mismo: en torno al cinco por ciento de la mercancía con la que se pretendía comerciar.
Antigua Carcel |
Esta Cañada Real Segoviana ó Gr-10 va del Cuadrón a Bustarviejo
y debía ser una importante vía de comunicación.
Volvimos sobre nuestros pasos, bajando sin dejar la Cañada y en
la parte más baja, cerca del túnel por donde sale el tren de Burgos (túnel que
comienza en Garganta de los Montes) estaban las ruinas de una antigua cárcel
donde los presos redimían penas con el trabajo de construir la vía del nuevo
ferrocarril de Burgos.
José Luis estaba cansado y decidió comer allí, yo me quedé con
él y los otros 3 marchosos siguieron adelante pues no querían subir después de
comer. Efectivamente, desde el túnel hay una continua sucesión de subidas que
parecen no terminar, hasta que se deja la Cañada para tomar a la izquierda el
camino de Lozoyuela que nos lleva de vuelta a Garganta. Antes de comenzar estas
subidas hubo que atravesar un rebaño de ovejas custodiado por feroces mastines
que nos amenazaban con sus ladridos, aunque con gran temple y serenidad
logramos pasar de largo. Ya en el camino de Lozoyuela, cerca de donde comienza
la subida al Pico del Cuadron, vimos a los otros 3 marchosos que estaban
terminando de comer, todavía pudimos compartir el aguardiente y chocolates.
Simplemente quedaba dejarnos caer hasta los coches, pero antes de volver, tomamos un café en el único bar que encontramos
abierto(parece una letra de Sabina). Al final fueron 14,5 Km en una marcha asequible pero con mucho tobogán y se hizo a un ritmo normal sin excesivas paradas ni interrupciones.
No tenía pinta de cumplirse la amenaza de nevar por la tarde, pero en la sierra nunca se sabe.
No tenía pinta de cumplirse la amenaza de nevar por la tarde, pero en la sierra nunca se sabe.
M.A