jueves, 31 de marzo de 2011

LA CRUZ DEL MIERLO 30-03-2011

Ruta 314 “la cruz del Mierlo”
Seis marchosos nos juntamos en el aparcamiento del Centro de Interpretación de la Pedriza, Jesús Porro, Miguel Ángel, Paco, José Luis, Manolo y Fernando  para estudiar la forma que le daríamos a la ruta 314 “la cruz del Mierlo”
La primera decisión a propuesta de Paco fue no llegar por la senda del Berzosillo hasta la pista asfaltada a la altura de donde sale el Pr 16, sino a la altura de unas roca girar a la izquierda y tomar la pista asfaltada mas abajo, subir la pista asfaltada hasta el Km 5 en vez de bajara por la pista asfaltada hasta el Km 5 que era la propuesta oficial.

Llevamos los coches al aparcamiento del Collado de Quebranta Herraduras y comenzamos a subir la senda del Berzosillo sobre las 11,20. El día estaba nublado, con niebla en la parte alta y hacía algo más fresco del anunciado. A falta de otra prenda de abrigo, M.A se puso un chaleco reflectante, con lo que sirvió también de punto de referencia.

Efectivamente a la altura de unas rocas, de las que Paco se acordaba muy bien, sobre las 12,  torcimos unos metros a la izquierda y tomamos la pista asfaltada. Después de un par de curvas llegamos al Km. 5 y un poco antes por el cauce de un arroyo, del que también se acordaba muy bien Paco, comenzamos la ascensión monte arriba, sin sendas, ente jaras y pinos de repoblación, cómo dice Andrés Campos , siendo notable todavía el aterrazamiento que debieron hacer para la planta de los pinos. Tras alcanzar la alambrada de referencia, la cruzamos y llegamos  al collado  de Valdehalcones.
Allí comenzamos el juego de ver quien encontraba la cruz, pues Paco no quería decirlo, al fin creo que la encontró Jesús a las 12,30.. Quede la foto como testimonio de la misión cumplida.
Allí mismo al pie de la cruz descansamos los seis, en compañía del Pastor del Mierlo que también se supone que descansaba allí en paz. Tomamos los frutos secos y vino de Cariñena y escuchamos una historia inacabada de un tornillo no standard que anda buscando Paco para una plancha. Emprendimos la bajada por una senda que baja justamente a la pista asfaltada a la altura  donde acaba el sendero del Berzosillo (donde teníamos que haber ido según la ruta oficial). No entendemos como Andrés Campos no propuso esta senda para subir al collado Valdehalcones (1354 m.) en vez de campo a través.
En vez de bajar por la pista forestal decidimos tomar un camino que sale de ese mismo punto hacia Canto Cochino con la idea de comer allí, pero cuando llegamos vimos que la zona de recreo estaba tomada por dos autobuses de escolares y cómo a nuestra edad nos gusta más el sosiego que el bullicio, decidimos comer un poco más abajo sobre unas rocas, con una vista inmejorable  del río, de las Torres y de Cabeza de Hierro.
Además el día fue mejorando y hacía un ambiente muy agradable.
La sobremesa se amenizo con la lectura de dos artículos: “Adiós muchachos” y “Culpables sin condena” y también  la carta de Pablo al País. Se habló de que tendría que existir la figura de “crimen económico”, de Centrales Nucleares y de otros temas de actualidad.
Regresamos desde Canto Cochino al collado Quebrantaherraduras por los conocidos atajos.
En fin, un día estupendo, La Pedriza es un sitio que siempre gusta y sorprende por muchas veces que se visite.