viernes, 15 de enero de 2016

Cabeza de la Huerta 13 enero 2016




Comenzamos el año votando por esta excursión, que ya algunos habían realizado hace dos años por las mismas fechas (15 de enero), pero que en mi caso no conocía. El punto de encuentro estaba entre el km 1 y el 2 de la carretera M539 que conduce a Cebreros. Allí nos reunimos Miguel Angel, Miguel, Jero, José Luís, Juan Angel , JesúsGC y el que escribe,


para empezar sobre las 11.30 la ascensión. Paco, en quien teníamos puestas nuestras esperanzas (bota) no pudo venir por indisposición.

El día no era demasiado frío y se presentaba con un sol reconfortante y casi sin nubes. La subida transcurre por caminos forestales, en ocasiones muy anchos, que atraviesan pinares muy cuidados. Solemos preferir senderos, son más románticos, pero en esta ocasión el espectáculo de los montes que se iban descubriendo a medida que se cogía altura, recompensaban de ese inconveniente. La claridad del día permitía visualizar las montañas que ya se alzaban en la provincia de Ávila.

Nos paramos a tomar los panchitos, en la parte alta de La Cordera, en un punto en que las cabras también parece que suelen visitar, nos acordamos de Paco ( bota) y allí Miguel descubrió el por qué su cámara se negara a disparar, no fue ese el único problema fotográfico de la jornada, ya que Chicho(yo) había traído una pequeña cámara (Polaroide Cube) que su hija le había prestado para que jugara (uno es cómo un niño) y que al llegar a casa descubrió que no había conseguido grabar los vídeos que intentó hacer de aquellas hermosas y lejanas vistas. Ahora ya sabe(veremos!).

Llegamos a Cabeza de la Huerta, en donde se alza un observatorio para prevenir incendios en muy buen estado,

y desde allí, el punto más alto de nuestra excursión,  pudimos observar de nuevo, pero esta vez en todas las direcciones, el espectáculo de picos y picos que se ofrecían a nuestra vista. Destacaba, por su cercanía, el pico Almenara, que en otras ocasiones solemos visitar.



Comimos en el mismo punto de la excursión pasada, esa mesa protegida de lluvias que se alza muy cerca de donde suelen tirar al plato (Las cuatro tablas).


No hubo charla comentando lo acontecimientos políticos de Cataluña y nuestra España, quizás debido a que todos estamos un poco cansados de tantos mensajes y preferimos centrarnos en los turrones posnavideños y en el café; de todas formas, hay tiempo y tiempo para hablar de política dado la situación actual.

La vuelta, al ser siempre bajada, no ofreció ningún esfuerzo y pronto estuvimos en donde habíamos dejado los coches.Fueron 13 km y 500 de desnivel, pero resultó muy fácil.

Chicho