miércoles, 28 de abril de 2021
Marcha del 28 de abril 2021 a la Dehesa de Navalvillar de Colmenar
Para el dia 28 la marcha votada para ir a la pedriza se pospuso una semana debido a imponderable de pandemia y meteorología
Asi que como Jero y Paco habían cumplido años y están en buena forma física decidieron “carpe diem” y celebrarlo invitando a una comida en el restaurante Ermita de la virgen de los Remedios en Colmenar
Seis marchosos respondieron a la invitación JP, Wolfgang, Miguel, Jero, Paco y un servidor JL
Nos juntamos en el parking de la base de helicópteros al lado de la Ermita Virgen de los remedios para dar una vuelta entre las 12h y las 14h, por la dehesa de Navalvillar que estaba verde, Florida y hermosa en esta primavera lluviosa.
El paseo incluida la antigua mina de cobre y plata, las ruinas visigodas fue insuperable pues apenas cayeron cuatro gotas.
La comida estuvo estupenda, con postre, café, chupitos, …
A los homenajeados les regalamos un gorro de montañero y les cantamos feliz cumpleaños
Pasadas las 17h volvimos a casa
Saludos JL.
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3 comentarios:
Se ve muy bonita la dehesa con tanta lluvia que ha caido esta primavera.
Me alegro que lloviera poco y pasarais un buen día.
El restaurante parece un sitio agradable.
No recuerdo de veces anteriores el sitio de las minas.
Reitero mis felicitaciones a los cumpleañeros y supongo que no muy tarde celebraremos los 70 de los dos M.A
Todo el mundo que faltó tenía una escusa justificada. Pero en este grupo no pasa nada pq siempre hay suficientes para toda excursión/ celebración. Estuvo bien y resultó un día muy agradable y lo único que echamos de menos fue a los que no pudieron venir. Restaurante notable y lo demás sobresaliente.
JP
Quiero resaltar que esa dehesa estaba llena de sorpresas para mí. Lo primero fue visitar un asentamiento visigodo del siglo VIII (encontraron monedas del 711); luego, las minas de plata y hierro; después en la dehesa se han rodado películas como Espartaco o El Cid debido a que los planos sobre el horizonte no reflejan ningún poste de la luz, ni casas de hormigón, ni torres elevadas, quedando aún restos de los decorados; además,cerca del restaurante, había tumbas visigodas y una vista excepcional del pantano de Santillana, de la Pedriza con su Yelmo. Y el restaurante es para volver.
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